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Respecto a las informaciones recogidas en algunos Medios sobre unas exequias en la Parroquia de Cando, en Serra de Outes, el Arzobispado de Santiago comunica que:
1.- Este Arzobispado ha permanecido abierto al diálogo con las partes implicadas tratando de conocer las motivaciones y los hechos a los que se aluden.
2.- Esta Institución reconoce que se ha salvaguardado en todo momento el derecho de enterramiento de los fieles católicos, lamentando mucho el desconsuelo que se haya podido producir inintencionadamente ante la pérdida de un ser querido.
3.- Es prerrogativa de cada Parroquia regular los usos y costumbres comunes a todos los feligreses del lugar, de acuerdo con las normas prescritas por la liturgia eclesiástica. Asimismo, la gestión del cementerio parroquial recae dentro de las responsabilidades del párroco.
4.- Este Arzobispado valora el compromiso del párroco, D. Roberto Freire, en la implementación de una pastoral llevada a cabo por un equipo diverso de laicos, destacando especialmente la participación activa de las mujeres.
5.- La Iglesia tiene la responsabilidad de velar por el bien de todos los fieles, especialmente en circunstancias sensibles como las exequias. En este caso, es esencial que se fomente un ambiente de cordialidad y respeto entre los miembros de la comunidad parroquial. Se priorizará siempre el diálogo constructivo, la empatía y la comprensión mutua, buscando soluciones que fortalezcan los lazos de fraternidad y armonía entre todos los feligreses, según el espíritu evangélico.
