El Arzobispado de Santiago y Abanca suscribieron hoy un convenio financiero a lo que podrán acogerse parroquias y sacerdotes diocesanos. Suscribieron el acuerdo el ecónomo diocesano, Fernando Barros, y el director territorial de Abanca en Santiago, Juan Carlos Carnero.
El convenio incluye gestión de recibos, pago de nóminas y pensiones o gestión de cuentas. También se contempla la posibilidad de gestionar seguros y asesorar sobre las pólizas que mejor se adapten a las necesidades de cada Parroquia o ente independiente. Se incluyen, además, aspectos relativos la tarjetas de débito y crédito asociadas la cuentas de la Archidiócesis o de las parroquias.
El convenio se aplicará a las relaciones establecidas entre el Arzobispado, las parroquias y demás entidades dependientes del Arzobispado con Abanca. Su duración será de un año a partir de su firma.